Sketchbook 01.01.16

El año pasado acabé con varias libretas de bocetos; algunas con nefastos resultados, otras peores. Decidí prolongar la agonía de algunos de esos bocetos metiéndolos al Photoshop; otros ya ni para eso daban. Aquí van algunos.

Hombre cargando una ausencia. Tinta y acuarela.

Libreta01El mismo, pero tras pasar por Photoshop donde perdió al barbón y ganó una gallina.
HombrePez El alto costo de la vida. Tinta.
Libreta04El vendedor de ilusiones.Libreta02

En Photoshop se le agregó la textura para dar la ilusión de grabado antiguo y que la gente se maraville de lo baratos que eran los iPhones en el pasado.

VendedorIlusiones

Viñetas varias que mueven a la reflexión respecto a los problemas bélicos que aquejan al mundo. Tinta.

Libreta05

Escucha cuidadosamente. Tinta.

Libreta03

En Photoshop se situó la escena en el ártico y se le dio mayor relevancia a la arquitectura alienígena. Escucha

Imaginación aguda

La otra noche me salió en una galletita de la suerte china un papelito que decía: «Ud. posee una mente activa y una imaginación aguda«. Aunque me han tocado mensajes peores como ese que decía: «Ud. está comiendo comida china frente al televisor en un sábado por la noche, así que Ud. es patético«, éste no dejó de indignarme por el sutil tono sarcástico. Hubiera preferido algo más en el sentido de «Ud. es un dios sexual y el mundo debería rendirse a sus pies» o «En el transcurso de la semana, Carlos Slim le cederá el 23% de su fortuna«.

En venganza, pegué el papelito en un block viejísimo que me encontré y le dibujé monitos horrorosos alrededor, que después digitalicé, para algún día poder imprimirlo en tamaño gigante y colocarlo en la pared del restaurante chino.01ImaginaciónAgudaSketch 02ImaginaciónAgudaTrazos 03ImaginaciónAguda 04ImaginaciónAgudaFinal

Bailando en la manteleta

Mis restaurantes favoritos son aquellos que colocan en sus mesas manteletas de papel, porque me brindan la invaluable oportunidad de ponerme a garabatear y evadirme así de las conversaciones y otras desventajas de la convivencia humana.

La última vez que asistí a uno de estos bienaventurados establecimientos, mientras mis acompañantes discutían temas trascendentales del acontecer nacional, yo dibujé el siguiente adefesio:

ConejoManteletaSketch

El resultado me pareció poco menos que satisfactorio, pero decidí llevarme la manteleta porque el gerente del restaurante amenazó con demandarme por contaminación visual si no lo hacía.

Ya en la incomodidad de mi hogar y desprovisto de una mejor alternativa para emplear mi abundante tiempo libre, escaneé el garabato y con ayuda del Adobe Illustrator lo convertí en la siguiente imagen. ConejoManteleta01 No me gustó, así que le quité el paisaje y dejé al conejo en una habitación vacía que estuviera más en sintonía con su gesto desconcertado y con la vacuidad de mi vida.ConejoManteleta02 Fue entonces cuando me di cuenta de que el conejo estaba bailando, solo que el gesto facial no coincidía con su expresión corporal. Así que se lo cambié, le agregué un moderno reproductor de música estruendosa, algunas notas musicales y una frase sangrona pero emotiva.ConejoManteleta03Luego hice la versión en español para que se comercializara también en el mercado hispano. 
ConejoManteletaSp

Al final me quedé con una cursi imagen de un conejo bailarín, la certeza de que las manteletas de los restaurantes causan gastritis y la sospecha de que en el fondo solo soy una quinceañera con síndrome premenstrual y fuertes problemas de autoestima.

Réquiem por una compañera

Tengo una mórbida fascinación por las libretas para dibujar; no puedo resistir la tentación de comprarlas. En consecuencia, tengo una amplia colección que incluye ejemplares de los más diversos tamaños, colores y tipos de papel. Todas nuevas e inmaculadas.

La cuestión es que me gusta comprarlas, pero no usarlas. Me causa un remordimiento inenarrable desperdiciar las blancas hojas con mis garabatos (lo que no habla bien de mi autoestima, aunque sí de mi sentido estético). Esa es la razón por la que siempre dibujo en papel reciclado y mantengo las libretas en estado virginal.

No obstante, el año pasado me regalaron una Moleskine y, por razones indescifrables, decidí mancillarla. El 7 de diciembre de 2012 la inauguré con los siguientes dibujos, que siendo muy generoso, solo podría calificar de espantosos.01-02

A pesar del resultado, no me detuve, y a partir de entonces, seguí abusando de la pobre libreta, con desvaríos como los siguientes: 59-62 64-67 68-71 92 La libreta se volvió una compañera inseparable que me permitió contrarrestar el aburrimiento y la estulticia a los que me veo expuesto en casi todas mis actividades cotidianas. 100 104 También constituyó un inmejorable paño de lágrimas para consignar todas esas pequeñas victorias y derrotas que confeccionan la vida. 124-127136

Algunos de los dibujos me gustaron y, tras ser escaneados y coloreados, me resultaron aborrecibles; la mayoría lo eran desde un inicio. No obstante, los de las últimas páginas me parecieron menos deleznables que los de las primeras:140 148

Hace unos días me percaté que los dibujos comenzaban a profetizar el temido fin de la libreta:152 Y los de la última hoja resumían a la perfección la experiencia vivida en compañía de la Moleskine:

156

Aquí a colores, para ilustrar que no pierdo las esperanzas:
156-2 Hoy, tras casi un año, con lágrimas en los ojos, le digo adiós a una amiga, a una amante, a una maestra que me enseñó muchas lecciones invaluables (por ejemplo, que guardarla en la bolsa delantera del pantalón se ve mal); pero que, sobre todo, me permitió librarme de traumas de la infancia (en los que nuestra posición económica nos obligaba a reciclar hasta el papel del baño), y así, hoy ser capaz de gritar inflamado de orgullo:

«¡Puedo echar a perder una libreta carísima con mis monos horrorosos!». 

Te voy a extrañar…

Lo bueno es que tengo una caja llena de compañeras inseparables.

Edificación

El dibujo de abajo fue realizado en un arrebato de desesperación cuando alguien, en medio de una discusión, sugirió que «todo es cuestión de perspectiva».

Perspectiva01SketchEste es el mismo dibujo de las intolerables edificaciones, empeorado por una mala selección de colores, fruto de otra discusión en la que alguien propuso: «todo depende del color del cristal con que se mire».

Perspectiva01

Y la siguiente, es la misma construcción, pero paulatinamente iluminada por la luz del desasosiego, obtenida en una discusión en la que alguien aventuró: «pero veámoslo a luz de los hechos, no de las opiniones».

Perspectiva01

 Nada me pareció más adecuado que nombrar el dibujo como:

Edificaremos nuestras ilusiones en el límpido cielo que cubre las ruinas de nuestras esperanzas.

Ratos emocionantes

Los siguientes son otros apuntes que tomé en una intensa reunión de trabajo. El primero es una complicada alegoría del lenguaje y las ideas (que sería inútil intentar explicarles), y el segundo es una elaborada reflexión a partir de un mensaje hallado en una galleta de la suerte. 132-134 Aquí está el primero tras ser abusado en Photoshop.132El segundo permanecerá igual. Al menos en lo que me recupero de la depresión causada por el hecho de que lo mejor que me puede pronosticar una galleta de la suerte es que en el futuro TAL VEZ habrá momentos emocionantes.