Gracias a mi inexistente vida social, pasé todas las vacaciones arrojando piedras a los adornos navideños inflables y dibujando una turba de monos psicóticos. En un honesto afán por documentar mi acelerada degradación mental, decidí tomarle una foto al dibujo al final de cada día, y al verlo terminado, nada me pareció menos adecuado que editar esas fotos en un breve pero abrumador video. Usé como música de fondo White Room de Cream (en una inmaculada versión de Frank Gambale), porque los monos están en un cuarto que originalmente habría de ser blanco y porque tanto éstos como los compositores de la rola, son afectos a consumir estupefacientes de alto calibre.
Este es el video:
Y este el dibujo terminado:
Dadle clic para apreciarlo en toda su grotesca magnificencia.
El dibujo me pareció tan poco logrado y tan fuera de lugar que decidí que era la cabecera ideal para este desangelado blog durante el 2014.
Feliz año.